Estoy sentado bajo este árbol, con una birome entre mis dedos y un papel en la otra mano . Estoy aquí para escribir algo lindo o tierno, algo que no se que sera pero son palabras que saldrán de mi y se volcaran en esta hoja, que para mi es preciosa como el cristal, mis poemas son escapatorias a algo parecido a un sueño, una escapatoria a un sueño desde el mundo real.
En mis poemas armo mis propios cuentos, ahí puedo contar mis verdaderos sentimientos sin ser juzgado o sin tener algún problema, ahí siento, miro y respiro algo que es irreal pero prefiero ser falsamente feliz a afrontar esta fea realidad. Mis poemas son como un grito de desesperación, de casi un niño que "Ayuda por favor", aunque mis poemas sean escapatorias también son cartas para entender que aunque el amor a veces es malo y cruel es lo único en lo que se puede creer.
Es una carta para que todos lean, para que todos aprendan a volver a hacer como eran antes, a dejar todo de lado, a dejar de lado lo complicado, a dejar de lado la guerra, a dejar de lado lo malo para hacer que todo sea mas bueno.
Mis poemas son algo con lo que me siento a gusto y me siento felizmente sensacional, aunque no lo crean a algunas personas pude cambiar, al poder tocar el corazón de alguien me siento especial.
Sigo sentado bajo este árbol esperando caer la manzana que me haga reaccionar, veo las hojas caer y ya no quiero verlas mas, quiero el árbol verde llenos de flores rosas como en los cuentos de amor.
El árbol es el mundo, sus hojas los habitantes y la manzana el amor.
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